Mossos antidisturbios: qué son, características y más

Más de 400 efectivos se dedican al mantenimiento del orden público en Cataluña. Hablamos de los mossos antidisturbios, uno de los grupos más relevantes de la policía catalana.

Aunque esta fuerza autonómica es de sobra conocida, los equipos en los que se divide no lo son tanto. Hoy, vamos a descubrir a fondo al que se encarga de intervenir en algunas de las situaciones más tensas de la comunidad. ¡Adelante!

¿Qué son los mossos antidisturbios?

Los mossos antidisturbios son un conjunto de agentes de los Mossos d’Esquadra con una función especial: evitar el descontrol de la ciudadanía en momentos críticos como las protestas, el recibimiento de figuras públicas o las grandes concentraciones de personas.

Bajo su paraguas se integran dos unidades, las Áreas Regionales de Recursos Operativos (ARRO) y el Área de Brigada Móvil (BRIMO), creada como una réplica territorial de la Unidad de Intervención Policial (UIP) de la Policía Nacional. Como veremos en los siguientes epígrafes, para formar parte de cualquiera de ellas deberás superar las Oposiciones de los Mossos d’Esquadra, para las que en Oposiciones.es te ayudamos a encontrar una academia formativa.

Los mossos antidisturbios participan en cualquier situación en la que peligre el orden público, como las manifestaciones o los desahucios

Cuando consigas tu plaza, ejercerás en acontecimientos como los actos deportivos o las manifestaciones. Tu labor garantizará la seguridad en toda aquella situación susceptible de escalar y propiciar la delincuencia y el riesgo para los ciudadanos. Los desalojos, por ejemplo, son otro de los sucesos en los que deberás estar presente. Además de en estos escenarios especiales, como parte de los mossos antidisturbios, intervendrás ante catástrofes y colaborarás para la prevención del terrorismo.

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Equipamiento y entrenamiento de los mossos antidisturbios

Los mossos antidisturbios disponen de un completo equipo que contempla tanto la defensa como la intervención ante las situaciones de desorden público. Entre los materiales que utilizan, se encuentran los siguientes:

• Cascos de protección con videocámara integrada.
• Porras y pistolas de proyectiles de foam, una clase de espuma que no rebota tras su lanzamiento. También cuentan con lanzadores cargables con municiones fumígenas o con gas lacrimógeno.
• Chalecos y guantes reforzados, escudos, botas ignífugas y máscaras antigas.
• Espráis de pimienta y cañones de agua.
• Megáfonos para dar avisos a la ciudadanía.
• Vallas y redes.
• Furgonetas.

Los agentes aprenden a utilizarlos, sobre todo, durante el curso de especialización que imparte el Instituto de Seguridad Pública de Cataluña (ISPC), así como en las prácticas previas a la toma de posesión de la vacante. Durante la preparación de las oposiciones —en la que se incluye el examen de los Mossos d’Esquadra y el específico para acceder a los ARRO o a los Brimo—, también se gana destreza en el manejo del instrumental policial.

Las tácticas y técnicas más utilizadas en situaciones conflictivas

Dado que su labor implica el uso de herramientas que pueden causar daño en otras personas, las intervenciones de los mossos antidisturbios se encuentran totalmente reguladas en el DOGC, que es el Diario Oficial de la Generalitat de Catalunya. Además de la orden de actuar con proporcionalidad —es decir, según la gravedad de la situación—, el protocolo base es tratar de restaurar el orden con las medidas más pacíficas e ir aumentando progresivamente el grado de fuerza si estas fracasan.

El plan de actuación suele contar con una estrategia previa, en el caso, por ejemplo, de las manifestaciones. Cuando saben que tendrán que intervenir, los agentes estudian la zona en la que ocurrirá el suceso y sus alrededores, determinan posiciones tácticas para desplegarse y colocan vallas de 1,5 metros de altura a modo de protección.

Sin embargo, hay acciones que necesariamente deben coordinarse durante el conflicto, a medida que este se desarrolla. Estas son algunas de las técnicas que los mossos antidisturbios pueden poner en práctica en esos momentos:

• Negociación: los mossos antidisturbios deben comenzar su intervención con la palabra. Ante la violencia, los agentes conversan con quienes la protagonizan para tratar de detenerlos o para evitar males mayores. Por ejemplo, en una manifestación, los mossos pueden negociar con los manifestantes para que permitan el paso del tráfico y no obstruyan una vía principal que causaría graves retenciones. Las conversaciones muchas veces se producen en catalán, del que hay examen en las oposiciones al cuerpo.
• Advertencias: antes de emprender cualquier tipo de respuesta, los mossos antidisturbios suelen dar aviso empleando un megáfono. De este modo, las personas saben que se va a proceder a la carga y pueden o bien reducir el desorden o buscar modos de protegerse.
• Dispersión: más que un ataque directo, los embates de la policía catalana se centran, sobre todo, en dispersar a los implicados en el tumulto. Lo hacen empleando cañones de agua, liberando gas o lanzando proyectiles de espuma con subfusiles de precisión.
• Reducción y/o detención: en el cuerpo a cuerpo, los mossos antidisturbios recurren a técnicas de autodefensa para protegerse e inmovilizar a los sujetos. Las acciones terminan con la detención mediante el uso de las esposas y el traslado a las dependencias policiales.

Incidentes históricos en los que intervinieron los mossos antidisturbios

Si, tan solo en un año, los mossos antidisturbios pueden actuar en más de 200 manifestaciones, no es de extrañar que a lo largo de su historia hayan realizado numerosas intervenciones que resultaron ser esenciales.

Algunas destacan, como el papel del cuerpo durante 2017, cuando el movimiento independentista catalán alcanzó su punto crítico. Los Mossos d’Esquadra estuvieron presentes en varias de las protestas que se produjeron durante este periodo de tensión, tal y como harían en 2020 para frenar la revuelta popular ante las restricciones por la crisis de la Covid-19.

Más alegre, aunque no menos peligroso, fue la celebración, en 2023, del título barcelonés tras el derbi frente al RCD Espanyol. El júbilo de Barça por su victoria provocó la invasión del campo por parte de los fanáticos del equipo vencido, lo que propició la rápida intervención de los antidisturbios para escoltar a los jugadores y evitar el enfrentamiento entre los aficionados.

¡Únete a los Mossos d’Esquadra!

Los mossos antidisturbios son una fuerza de contención imprescindible para evitar daños personales y materiales. En esencia, su papel es garantizar el orden público cuando este pasa a estar en un equilibrio precario, lo que requiere valentía y una formación física y mental correcta.

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