Funcionarios interinos: Todos los detalles

Al hablar de trabajar para la Administración, el primer pensamiento suele ser el de ocupar una vacante de por vida. Pero el universo del empleo público va mucho más allá. Al servicio de este sistema es posible encontrar todo un crisol de puestos que no tienen la estabilidad de quien ya ha aprobado unas oposiciones. Entre ellos están los funcionarios interinos, una designación con la que podrías tropezarte y que puedes contemplar en tu ruta hacia la plaza. Pero, ¿qué implica realmente este título? ¡Descubrámoslo!

¿Qué son los funcionarios interinos?

El nombre puede confundir, pero los funcionarios interinos no son los de carrera. A diferencia de estos últimos, los primeros ocupan un puesto de trabajo temporal, por lo que acabarán yéndose.

Durante el tiempo que permanecen en el empleo, estos profesionales ocupan la vacante reservada para un empleado público que, a diferencia de ellos, haya aprobado las oposiciones con la nota suficiente como para hacerse con la plaza. Realizan las mismas funciones, pero siempre en sustitución o en espera de que llegue el propietario de la vacante.

Existen varias situaciones en las que los organismos públicos pueden recurrir a los funcionarios interinos. Normalmente son sustituciones, pero también puede hacerse uso de ellos para puestos ideados solo para un tiempo concreto. Las distintas posibilidades pueden comprobarse en el Estatuto Básico del Empleado Público, que menciona los siguientes casos:

• Sustituciones temporales de funcionarios de carrera, como la cobertura de bajas.
• Existencia de vacantes libres, anunciadas como parte de la Oferta de Empleo Público, que no puedan cubrir funcionarios de carrera.
• Programas de tipo temporal, limitados a tres años con posible prórroga de doce meses.
• Puestos propiamente temporales al servicio de la Administración.
• Demanda laboral para dar salida a un exceso puntual de trabajo. La duración en este caso no podrá sobrepasar los seis meses dentro del mismo año.

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La metamorfosis: ¿Cómo convertirte en interino?

¿Cómo logran los funcionarios interinos ejercer como tal en el sistema público? Pues a través de listas o bolsas que pueden tener distintas características. Un modo muy habitual, sobre todo en el caso de la rama sanitaria, es haber aprobado unas oposiciones, pero sin alcanzar la nota suficiente como para conseguir la plaza. La mayoría de Enfermeros, por ejemplo, reciben llamadas en función del puesto que tengan en los listados públicos gracias a sus notas en las oposiciones de Enfermería.

En este caso, los contratos se ofertan por orden, del más alto al último de la lista, y el lugar en la misma depende de la nota del examen y otros méritos como la experiencia laboral del candidato. Aceptar estos empleos temporales suma de cara al siguiente proceso público, siempre que pertenezca a la modalidad del concurso-oposición.

Esta vía hacia la interinidad también prolifera entre los Maestros de las oposiciones a Educación. Del mismo modo, se da en algunos puestos de funcionarios no docentes, como el de las Oposiciones a Auxiliar Administrativo de Corporaciones Locales.

Los funcionarios interinos acceden a sus puestos a través de listas o bolsas extraordinarias que les permiten sumar puntos para conseguir la plaza fija

En otras profesiones existen también las bolsas extraordinarias, que se abren cuando se acumulan las tareas y el personal fijo no es suficiente para hacerles frente. Pueden presentarse personas que no han superado las oposiciones, pero deberán acreditar los estudios necesarios para desempeñar las funciones que demanda el puesto.

Escojas la vía que escojas, debes tener en cuenta que tu empleo no será permanente. Pero la experiencia que adquieren los funcionarios interinos te ayudará a fijar conocimientos y a superar mejor las pruebas prácticas de tu examen, así que ¡aprovecha!

3 Trucos para acceder a las bolsas de empleo de funcionarios interinos

Acceder a la familia de los funcionarios interinos puede ser más fácil si cuentas con un par de cosas a tu favor. La primera es disponer de los estudios que se estipulen en la convocatoria o de alguna formación relacionada como cursos, que tendrás que acreditar debidamente cuando presentes tu solicitud.

Haber aprobado alguna de las pruebas del proceso público de empleo también multiplicará tus posibilidades. Además, y como siempre, el bagaje marcará un tanto. Si ya has trabajado para el organismo público, será más fácil que vuelvas a hacerlo. Tu acceso a la bolsa te hará sumar más puntos y eso te acercará a la meta… ¡La pescadilla que se muerde la cola!

Características de la interinidad: Un puesto entre dos mundos

Como hemos dicho, la principal característica de los funcionarios interinos es la temporalidad de sus puestos. Sin embargo, este rol encierra otras peculiaridades.

Una de ellas es el tipo de relación que se mantiene con el organismo público, basada en la legislación laboral. Hablamos de contratos de duración variable en función de las circunstancias, pero que, con todo, tendrán una retribución igual a la que obtendría un empleado público de carrera en el mismo puesto.

Al contrario que estos últimos, los funcionarios interinos no pueden disfrutar del privilegio de la promoción interna. Su designación tiene que estar respaldada por la urgencia o la necesidad, y las tareas que pueden desempeñar están muy perfiladas. Además, la resolución de cualquier conflicto pasa por los cauces del orden social y no por procedimientos internos.

La plaza fija: ¿Posibilidad o sueño?

¿Conseguir una plaza fija siendo interino? Existe la oportunidad o, al menos, se vislumbra.

En el verano de 2021, el Gobierno aprobó en el Congreso de los Diputados la tramitación de un proyecto de ley al respecto. La decisión indicaba que los funcionarios interinos que lleven más de una década ocupando una vacante en la que nunca se hayan convocado oposiciones podrán hacerse con la plaza sin tener que pasar por los exámenes correspondientes.

El procedimiento en este caso será una valoración de méritos. El objetivo es reducir la temporalidad dentro de la Administración Pública, pero el documento todavía puede sufrir variaciones.

Deja atrás el ser funcionario interino y hazte con tu plaza fija

En muchas ocasiones, formar parte de los funcionarios interinos es la antesala de convertirse en empleado público de carrera. Eso sí, para este primer contacto con la Administración tendrás que formarte, y continuar tus estudios mientras ocupas el puesto temporal que se te designe. De este modo, los puntos que sumes con la experiencia se añadirán a la nota que saques en el examen. Ambas cosas van de la mano, por lo que te recomendamos perseverancia.

Mantenerla a lo largo del tiempo será más sencillo con el apoyo de una academia. En Oposiciones.es hemos hecho un cribado de las que ofrecen un programa más completo. Rellena el formulario y contactaremos contigo para recomendarte las mejores de forma gratuita. Con una buena preparación y el bagaje que da la interinidad… ¡La plaza será tuya!